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Recuerda porqué estás aquí
Ser un amigo de las niñas y los niños es acceder al tesoro más importante (su amistad). Cuando eres amigo de las niñas, niños y adolescentes, sin importar su condición, tu alegría y la de ellos se duplicará. Creerán en ti. Así que necesitas abrir los ojos y los oídos pues, aunque no los escuches y los veas, deberás estar atento a su voz y su presencia.
Para cada niño, será un héroe de corazón. Hoy, cuando el mundo parece un lugar peligroso para ser niño, lo harás sentir seguro en circunstancias difíciles. Gracias a ti, crecerá más fuerte, sano y feliz. Cuando eres un amigo de verdad, intuirás su carencia, pues son los más vulnerables, así que deberás cuidarlos, protegerlos y actuar.
Para cada niño, un compañero leal. Aquel que sin importar las condiciones está ahí, en el momento justo. Para cada niño, un abrazo. Serás quien sane su corazón cuando esté triste. Sea quien sea, viva donde viva, cada niño merece una infancia con muchos amigos como tú. Deberás estar “cerca” de alguien que, aunque separados físicamente, están próximos de corazón.
Para cada niño, una esperanza. Ser amigo de verdad no es fácil, pero si el propósito es proteger los derechos de los niños y las niñas, vale la pena el esfuerzo. Ellos confiarán en ti con la seguridad de que responderás favorablemente a sus emergencias. Para cada niño, un verdadero amigo que cambie su historia. Un amigo como tú.
